La representante de O’Higgins acompañó a los residentes del sector poniente de Rancagua a una reunión con las autoridades regionales del Ministerio de Obras Públicas, donde manifestaron su temor por la posibilidad cierta de que sean desalojados de sus propiedades.

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La diputada por la Región de O’Higgins, Natalia Romero, salió a respaldar a los cientos de vecinos de los sectores Tuniche y La Moranina, ante el grave temor que mantienen por la posibilidad de que las autoridades les expropien sus propiedades y terrenos, como parte del proyecto de mejoramiento de las rutas H-10 y H-210, que conecta a las comunas de Rancagua y Graneros por el sector poniente.

Al respecto, la parlamentaria acompañó este lunes a una reunión que sostuvieron los vecinos con la Municipalidad de Rancagua y las autoridades regionales del Ministerio de Obras Públicas (MOP), donde no sólo manifestaron su preocupación por las expropiaciones que se estarían planeando en el sector, sino que también su molestia por la falta de información relacionada con el proyecto.

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“La ampliación y el mejoramiento de esta ruta es un proyecto muy anhelado por la comunidad, porque vendrá a mejorar la conexión del sector poniente de Rancagua, pero el desarrollo de estas obras no puede ser a costa de los vecinos de esa zona, ni menos a espalda de ellos. Porque lamentablemente, han tocado cientos de puertas y recién ahora logramos reunirnos con las autoridades del MOP, sin que se nos entregara toda la información necesaria”, manifestó Romero.

Por lo mismo, la representante del Distrito 15 cuestionó a las autoridades de Ministerio de Obras Públicas, asegurando que “es inaceptable que pretenden despojar a todas estas familias de sus propiedades y terrenos que adquirieron con mucho esfuerzo”, criticando incluso que “se les ha entregado información confusa respecto a las expropiaciones, lo que es una burla con todos ellos”.

Producto de lo anterior, la diputada Romero anunció que, además de seguir acompañando a los vecinos de los sectores Tuniche y La Moranina en las acciones que emprendan, oficiará a distintas reparticiones públicas con el objetivo de que transparenten todos los detalles de las obras, como los plazos, los recursos involucrados, el financiamiento y, por cierto, las expropiaciones que contempla.

“Un proyecto de esta envergadura requiere ser sensibilizado con todos los vecinos de la zona, pero en especial con quienes más se verían afectados. Lamentablemente, las actuales autoridades no han estado a la altura y han adoptado una pésima actitud con ellos, pese a que los habitantes siempre manifestaron su completo respaldo al proyecto, pero no a costa de su tranquilidad. Por eso los vamos a seguir acompañando en este proceso, porque nadie merece vivir con el temor de perder su hogar sin que les entreguen ninguna información oficial”, cuestionó la parlamentaria por O’Higgins.

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