La representante de O’Higgins valoró la iniciativa en beneficio de la tercera edad y quienes tienen dificultades para desplazarse, lo que deberá estar certificado por un recinto médico.

La diputada por la Región de O’Higgins e integrante de la comisión de la Familia de la Cámara Baja, Natalia Romero, respaldó un proyecto que busca que las cédulas de identidad de los mayores de 80 y las personas en condición de postradas tengan una vigencia de 20 años para todos los efectos.

Al respecto, cabe recordar que actualmente el documento tiene una duración de hasta diez años, sin hacer distinción entre los adultos mayores y las personas que tienen dificultades para renovarlo.

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Por lo mismo, la representante del Distrito 15 valoró que se haya aprobado por unanimidad dicha iniciativa, que beneficiará tanto a los adultos mayores que hayan cumplido 80 años, como también a los mayores de 60 que estén postrados y cuya condición sea certificada por un centro asistencial.

“Es muy importante que en el Congreso avancemos con proyectos que le hacen sentido a la ciudadanía y que vienen a mejorar la calidad de vida de las personas. Alguien que, lamentablemente, se encuentra postrado después de los 60 años, no tiene ninguna necesidad de estar renovando su cédula de identidad de manera periódica, así como tampoco los adultos mayores que superan los 80 años. Por eso es que respaldamos esta iniciativa y se terminó aprobando por unanimidad, porque con estos simples cambios podemos estar ayudando a un grupo de nuestra población que, sin duda, requiere de este tipo de medidas por la etapa de sus vidas en que se encuentran”, sostuvo Romero.

En ese sentido, si bien el Registro Civil ofrece en la actualidad una atención domiciliaria para las personas que tienen algún tipo de discapacidad o incluso para los adultos mayores, la legisladora por O’Higgins indicó que nunca ha sido suficiente para cubrir a toda la población en dicho segmento.

Por esa misma razón es que se incluyó en el proyecto a las personas mayores de 60 años que están en condición de postradas, para evitar justamente que deban desplazarse a realizar dicho trámite.

De esta manera, y dado el importante respaldo que tuvo en la Cámara Baja, Natalia Romero llamó al Senado a tramitar la iniciativa con la mayor celeridad, argumentando que “es fundamental que avancemos con proyectos en apoyo a un grupo de nuestra población que tanto le han dado al país”.

“Desde hace muchos años que Chile está en deuda con los adultos mayores y las personas que tienen algún tipo de discapacidad. Por eso es que llevamos bastante tiempo proponiendo soluciones que mejoren su calidad de vida. Así, este proyecto permitiría que durante un largo tiempo no se tengan que desplazar al Registro Civil a renovar su cédula de identidad, evitando que se acerquen a cualquier tipo de aglomeración. Por lo mismo, esperamos que el Senado apruebe cuanto antes esta iniciativa y sigamos apoyando a nuestros adultos mayores”, reiteró la parlamentaria por O’Higgins.

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