Conforme los datos de contagiados y de hospitalizados por coronavirus aumentan, las autoridades deben tomar medidas. Aquí y en todo el mundo, el confinamiento, el cierre de comercios y las cuarentenas se han convertido en una constante del último año. La situación actual es que numerosas comunas de Chile se encuentran en cuarentena, entre ellas Rengo, que lleva ya dos meses de encierro total de la población y de cierre casi completo del sector servicios.

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Mientras los comercios esenciales se mantienen abiertos y se esfuerzan por satisfacer las necesidades de los habitantes y porque su propia actividad económica decaiga lo menos posible, otras medidas de salud han sido implementadas en Rengo. Un ejemplo de ello son las mejoras en la capacidad de los hospitales o el mayor control sobre el estado de salud de sus habitantes, tanto los ya infectados como los posibles casos positivos, que son controlados a través de una mayor realización de pruebas que busca prevenir los futuros contagios.

Ante esta situación, los más de 55.000 habitantes de la comuna de Rengo se mantienen relativamente tranquilos, trabaja desde casa si es necesario y sale a la calle para obtener bienes de primera necesidad. La lucha contra el coronavirus ya es algo que se ha instalado completamente en el día a día de todos.

Las actividades que continúan: servicios médicos, comercios esenciales y restauración con entrega a domicilio.

Los que tienen que trabajar fuera de casa, también lo hacen. Quizá con un poco de miedo, pero también con el orgullo que les provoca seguir activos y estar ayudando a sus conciudadanos. El personal sanitario, los dependientes de farmacias, bancos y supermercados son las caras más visibles de este trabajo que no cesa en Rengo, sin embargo, existen otros trabajadores que están ahí para mejorar estos días de encierro.

Con muchos restaurantes cerrados y otros prestando servicios mínimos de entrega a domicilio, la labor de los repartidores de delivery se ha disparado. Algunas de las grandes cadenas de reparto, como es el caso de Pedidosya no ha disminuido su actividad en estos meses. Se podría decir incluso, que la ha aumentado llevando a casa de los consumidores comida de todo tipo de restaurantes. El portl  https://www.pedidosya.cl/  precisamente ha aumentado sus visitas coincidiendo con estos meses de encierro de Rengo.

Aunque pueda parecer una labor mínima, el hecho de contar con esta vía de atención a los consumidores resulta fundamental para mantener el ánimo de todos. La comida a domicilio introduce novedad en los hogares y una sensación de que, a pesar de todo, los ciudadanos se esfuerzan por seguir disfrutando de las cosas que hacían antes de la pandemia.

En todas las zonas confinadas del país, esta es una actividad cada día más valorada. Ya antes del cierre de los restaurantes, la comida a domicilio estaba en auge, tras el aumento de locales que se iban sumando a la moda del delivery, por lo que es una suerte que este modelo de consumo tuviese unas buenas condiciones y estuviese ya implantado. Ahora, los habitantes de Rengo y del resto de comunas pueden disfrutarlo, si cabe, doblemente

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